En un mundo donde los errores logísticos pueden representar altos costos, retrasos o incluso la pérdida de clientes, garantizar una trazabilidad precisa dentro del centro logístico es clave. Y aunque existen tecnologías sofisticadas para rastrear productos, el punto de partida más eficaz y accesible sigue siendo el etiquetado.

 

Desde la recepción hasta la entrega final, una etiqueta bien diseñada, bien impresa y correctamente ubicada permite saber qué producto es, dónde está, de dónde viene y hacia dónde va. En este blog te mostramos cómo el etiquetado impacta cada etapa del proceso logístico y cómo SAT PCS ofrece soluciones integrales para mejorar la trazabilidad operativa.

 

¿Qué es la trazabilidad logística?

La trazabilidad es la capacidad de seguir el rastro de un producto a lo largo de toda la cadena de suministro, desde su origen hasta su destino. Esto incluye identificar su ubicación, lote, características, historial de movimientos y responsable de cada acción.

Una operación sin trazabilidad:

  • Tiene más errores de picking y despacho.
  • No detecta fácilmente productos vencidos o dañados.
  • Pierde tiempo en auditorías o conciliaciones.
  • No cumple con requisitos normativos en sectores como alimentos o farmacéutica.

 

¿Por qué el etiquetado es la base de la trazabilidad?

Las etiquetas con códigos de barras, QR o DataMatrix permiten capturar datos en cada punto del flujo logístico. Estas etiquetas actúan como “cédulas” del producto, permitiendo conectarlo a un sistema digital que registre automáticamente movimientos y estados.

Además, el 79 % de las empresas que han invertido en mejores prácticas de etiquetado afirman haber reducido errores operativos de forma significativa (Zebra, 2023).

 

Etapas del centro logístico donde el etiquetado es esencial

1. Recepción de mercancía

En esta etapa se validan productos entrantes contra órdenes de compra. El etiquetado permite:

  • Confirmar cantidades exactas mediante escaneo.
  • Identificar lotes, fechas de vencimiento o condiciones especiales.
  • Asignar código único si el proveedor no envía la etiqueta correcta.

SAT PCS recomienda aquí usar impresoras como la TT448 o ST48, rápidas y versátiles para impresión por lote o por unidad.

 

2. Almacenamiento y ubicación

Una vez recibidos, los productos se asignan a ubicaciones físicas (racks, estanterías, celdas). Cada ubicación puede tener su propia etiqueta, al igual que cada producto.

  • Esto permite localizar productos al instante.
  • Mejora la rotación FIFO/FEFO.
  • Facilita la automatización con lectores móviles.

Las etiquetas de polipropileno o cartón de SAT PCS ofrecen resistencia a ambientes húmedos, fríos o de alto tráfico.

 

3. Preparación de pedidos (picking)

Esta es una de las etapas más críticas. Errores aquí afectan directamente al cliente. Gracias al etiquetado:

  • Se reduce el riesgo de seleccionar la referencia equivocada.
  • Se puede escanear cada ítem para validar su inclusión en el pedido.
  • Se integra fácilmente con software de WMS o ERP.

El uso de ribbons de cera-resina y etiquetas adhesivas de buena adherencia es clave para evitar lecturas fallidas.

 

4. Embalaje y despacho

Antes de salir, los pedidos se etiquetan con información de trazabilidad: código del pedido, datos del cliente, transportadora, y más.

  • Permite rastrear el envío.
  • Evita confusiones en carga y entrega.
  • Se puede añadir código QR para facilitar devolución o postventa.

Impresoras como la XT46 con conexión WiFi permiten imprimir etiquetas desde zonas de despacho sin necesidad de PC central.

 

5. Devoluciones o logística inversa

La trazabilidad también es vital para gestionar devoluciones, retiros o cambios. Si el producto fue correctamente etiquetado desde el inicio, el sistema podrá identificar:

  • Cuándo fue enviado.
  • A qué cliente.
  • En qué lote o estado estaba.

Esto es crucial para sectores como farmacéutica, alimentos o tecnología, donde los estándares de trazabilidad son regulados.

 

SAT PCS ofrece etiquetas en nylon o resina lavable para productos que deben soportar fricción, limpieza o reutilización.

 

Buenas prácticas para un sistema de etiquetado trazable

  • Usa impresoras confiables y de alta resolución como las XT412, ideales para etiquetas con mucho detalle o códigos 2D.
  • Aplica códigos de barras o QR únicos por ítem, lote o bulto.
  • Utiliza etiquetas duraderas según el entorno (húmedo, refrigerado, abrasivo, etc.).
  • Usa software como BarTender o SAT Label Designer para diseñar e integrar tus etiquetas con tus plataformas logísticas.
  • Revisa periódicamente el estado físico de las etiquetas, especialmente en productos de larga rotación.

 

Resultados tangibles con un buen sistema de trazabilidad

  • Reducción del 50 % en errores de picking en centros que implementaron escaneo con etiquetas estándar (Anyline, 2023).
  • Hasta 70 % menos tiempo en auditorías logísticas gracias a etiquetas con códigos de barras bien integradas (LabelBlanks, 2024).
  • Disminución de pérdidas y extravíos en 30-40 % con trazabilidad por código único (GS1, 2022).

 

SAT PCS: Soluciones completas para trazabilidad logística

En SAT PCS ofrecemos:

  • Impresoras térmicas: TT448, ST48, XT46, XT412.
  • Etiquetas: papel térmico, polipropileno, cartón, poliéster, nylon.
  • Ribbons: cera, cera-resina, resina, resina lavable.
  • Soporte técnico y asesoría en integración con software.

Ya sea que tu operación sea pequeña o una bodega 3PL de gran escala, puedes construir trazabilidad desde el etiquetado con herramientas confiables, resistentes y escalables.